miércoles, febrero 16, 2005

Flores de Bach, superstición y la R.A.E.

Según el Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española, la superstición se define como toda creencia extraña a la fe religiosa y contraria a la razón. Al parecer, las creencias religiosas se libran de ese calificativo por el hecho de estar encuadradas en un sistema doctrinal. Por muy contraria a la razón que pueda resultar una creencia, basta con ser conforme al sistema religioso de referencia para no ser supersticiosa.

No acabo de tener claro si esto afecta a cualquier religión o sólo a la propia. ¿Puede uno calificar de superstición toda creencia no ajustada a la razón de las religiones rivales? ¿O el mero hecho de pertenecer al cuerpo doctrinal de una religión ahorra a toda creencia, por muy irracional que pueda ser, el bochornoso calificativo de “supersticiosa”? ¿Y que ocurre con quienes no profesan religión alguna? ¿Será reprendido por la RAE si llama a toda creencia irracional “superstición”, sea cual sea su origen? ¿Y que hay de aquellas creencias abandonadas por distintas religiones según nuestro conocimiento del mundo avanzaba? ¿Pasan a ser supersticiones, lo fueron siempre o nunca lo serán?

¿Y el caso de creencias que pertenecen tanto al mundo religioso como al seglar? ¿Son o no son supersticiones?

En fin, de una de estas últimas creencias quería yo hablar. En su forma más general, consiste en culpabilizar a las víctimas de determinadas desgracias. Castigo de Dios, se ha dicho cuando alguien padecía alguna calamidad de ese tipo. En la Biblia es fácil encontrar ejemplos. En muchas religiones orientales se recoge alguna forma de esta creencia, siendo un ejemplo bien conocido la reencarnación, en la que la vida nueva e incluso la forma física que adopte dependen de la “calidad” ética de los actos realizados en la anterior. Incluso para los griegos, el héroe es el que acata su destino y lo enfrenta con valor, mientras que el villano sufre por un destino que no acepta y contra el que se rebela y es ello la causa de sus males, peores que el trágico final del héroe, que actúa correctamente.

En muchas ocasiones, la víctima de los males es a su vez causa de los mismos. No hay dudas en determinados casos. Y en esos, lo supersticioso es mantener que son los astros, los hados o cualquier otro ente rector del destino los causantes de lo que la irresponsabilidad, la maldad o la negligencia de la propia víctima ha desencadenado. En otras, sin embargo, los males padecidos no son causa directa de “malos” actos de quienes los sufren.

Podemos distinguir ambos casos aplicando la razón, que; como dice la RAE y a falta de aclaración sobre mis dudas religiosas; es a su vez lo que evita el calificativo de supersticiosa para nuestra conclusión.

Pudiera pensar el lector de estas líneas que esas son creencias del pasado que sólo sobreviven en algunas religiones y no afectan a quien se ve libre de dogmas de fe o que, en todo caso, no afectan a cuestiones bien claras, como la causa de las enfermedades, por ejemplo.

Creo que quien esto diga no conoce a Edward Bach, el creador de la terapia floral (las cada vez más famosas “Flores de Bach”) que cuenta con admiradores y practicantes cada vez más numerosos,
y autor de un artículo en el que se deja ver claramente la vieja ¿superstición? de la que hablamos.


El infumable artículo, además de un magnífico ejemplo de supervivencia de viejas supersticiones, nos muestra otros acerca de aquellos que apoyan todo lo que suene a “alternativo”, por muy contradictorio que resulte. La homeopatía es claramente contradictoria con la terapia floral, además de incompatible. Sin embargo es “alternativa” a la medicina “oficial”. Y eso, al parecer, es considerado bueno.

No veo religión implicada, ¿será una superstición?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, el mismo anonimo reciente.

Lo que no sabe el que escribio esta critica sobre las Flores de Bach, es que ... se crearon en base a aplicar antiguas creencias astrologicas, por allá por 1930.

Bach era un medico infectólogo, que había tenido una pasada por la homeopatia: hasta el dia de hoy se usan remedios homeopaticos desarrollados por el mismo.

Mas tarde, desarrolló las esencias, que al principio eran 12, numero clave en astrologia, siendo cada esencia un "remedio" para excesos o defectos propios de cada signo.

Supuestamente son remedios de tipo "emocional", o del estilo de la flor Impatiens, que estaba destinada, parece, al signo Aries, caracterizado por su rapido genio e impaciencia...

Practiqué mucho el misterioso arte de "sanar con esencias de bach en base a su aplicacion mediante astrologia de la seria", vi casos notables.

Pero al cabo de un par de años, tomé distancia, y me dí cuenta hay mucho del inexplicable proceso de sanacion, la sugestion, la mente, ¿placebo? la confianza en la terapia, el enganche terapeuta enfermo... o el efecto de las esencias????

No se si las esencias de bach son sanadoras o no, pero si se que mucha gente se ha sanada de graves "afecciones emocionales", en base a ellas.

No es tan facil llegar y criticarlas o descalificarlas.

Cabe señalar que ademas de las esencia de Bach que desde 12 han llegado a ser 38 ( desconectadas creo yo de los origenes en base a creencias o "certezas" astrologicas de tiempos remotos tradicionales y arcaicos ) ahora han salido esencias de flores del amazonas, de flores de alaska, del desierto de sonora, de la estepa rusa, etc etc

En Nueva York hay un negocio que vende esnecias de flores de todo el mundo, cientos de variedades.

Espero que con este comentario tu vision del mundo de Flores de Bach se haya expandido y que puedas hacer una critica mas profunda y sólida.

Que merecen una buena critica, no hay duda, pero tal vez detras de esas esencias de flores, hay algo de la muy antigua ciencia de sanar. Por qué iguales médicos con iguales conocimientos, unos sanan, otros no sanan a los mismos enfermos ?

Asigan dijo...

Reciente Anónimo:

Mi crítica se refiere exclusivamente a dos aspectos de las flores de Bach.

Uno, principal, a laculpabilización del enfermo por su enfermedad, y otra a determinadas inconsistencias lógicas.

Nada más...de momento.

Oscar Mier dijo...

3 años tarde, pero:

La definición de fe en el diccionario de la RAE también es incómodamente religioso. Contiene referencias católicas. Además, no explica que la fe es creer en algo sin fundamentarse en la experiencia o en la ciencia. Me incomoda que uno se encuentre con propaganda religiosa de ese tipo cuando está tratando de buscar el verdadero significado de las palabras.

Asigan dijo...

Quizá la 5ª acepción cumpla esos requisitos.